Ciencias Sociales/UBA
Ante la falta de respuesta de la gestión seguimos enfrentando el desalojo y defendiendo el espacio recuperado por los estudiantes.
Jueves 26/02 19hs
Corte de calle y Acto en Av. Córdoba y Uriburu.
martes, 24 de febrero de 2009
Continuamos la lucha por el Estacionamiento
Un 24 de febrero pero de 1895 estallaba "la guerra necesaria" en Cuba
Redacción Central (PL).- El 24 de febrero de 1895 estalló la insurrección en el archipiélago cubano, después de una minuciosa preparación. Así comenzó lo que el apóstol José Martí definiera como "la guerra necesaria".
Si la contienda de los 10 Años (1868-1878) impuso a Cuba y España un elevado sacrificio, esta última sería más corta pero no menos cruenta.
La autorización del alzamiento la firmaron Enrique Collazo, Mayía Rodríguez y Martí el 29 de enero, pero no llegó a su Delegado en Cuba, Juan Gualberto Gómez, hasta la segunda quincena de febrero.
Toda la labor de aviso de Oriente a Occidente la realizó Gómez burlando el espionaje de que era objeto y alejado de los lugares habituales donde ejercía como periodista.
El 1 de abril Antonio Maceo desembarcó con Flor Crombet por Duaba, no lejos de Baracoa, y el 11 del propio mes lo hicieron Martí y Máximo Gómez por Playitas, pequeña ensenada en la costa de Cajobabo.
Ya se hallaban en Cuba los principales jefes como resultado de la incansable labor de Martí por la independencia de su patria y la unificación de sus hijos.
Dos años antes, como motor impulsor había fundado el Partido Revolucionario Cubano, que congregó a los patriotas dispuestos a la lucha bajo el pensamiento martiano "con todos y para el bien de todos".
El Apóstol estaba consciente que debía nacer una guerra, la cual consideró primero inevitable y luego necesaria. Y no le faltaba razón. Muy pronto su mirada profunda e inteligente supo descubrir, durante su permanencia en Estados Unidos, a "ese norte revuelto y brutal que nos desprecia".
Eran los planes de expansión y dominio que hervían en las entrañas del monstruo y se ceñían sobre América Latina y el Caribe.
A este fenómeno Martí lo llamó imperialismo e intuyó con toda claridad la urgencia de salvar a la futura nación cubana de las apetencias del poderoso enemigo.
Tan temprano como en el año 1803, el presidente de Estados Unidos, Thomas Jefferson, había postulado que Cuba era indispensable para la seguridad de su país y a sus manos debía pasar cuando fuera propicio.
John Quincy Adams proclamó un siglo después la teoría de la fruta madura para llevar a nuestro archipiélago cubano al regazo de Washington.
Pero la guerra iniciada el 24 de febrero de 1895 bajo el liderazgo de Martí y cuyo 112 aniversario conmemoramos, estalló la etapa definitiva por la independencia, alcanzada el Primero de Enero de 1959.
Martí, hijo de valenciano y de canaria, en su corta existencia de 42 años acumuló la experiencia del presidio político y el exilio.
Viajó por esta "América nuestra", que reconoció una y distinta en su diversidad, en su pasado y en su destino de la América del Norte.
Ejerció el periodismo con agilidad extrema en crónicas que expresaban la frescura y la profundidad de quien dominaba varias lenguas, y poseía una simpatía y capacidad de trabajo que a todos asombraba.
Un día dijo de sí mismo: "No vivimos en paseos y en orgías, sino regando la sangre por la tierra, y con la transparencia y la humildad de los apóstoles" . Y así lo inmortalizó su pueblo: el Apóstol.
lunes, 23 de febrero de 2009
Por una Tendencia Estudiantil Revolucionaria
Desde nuestros inicios comprendimos la necesidad de impulsar un movimiento estudiantil que fuera más allá de las reivindicaciones inmediatas del propio sector, y que ocupara el lugar histórico de los estudiantes en los procesos revolucionarios de Latinoamérica y el Mundo. No entendemos a la militancia en la universidad simplemente como una “fuente de cuadros” para un partido ni un movimiento, sino que valoramos el rol del movimiento estudiantil desde sus organismos de masas, contribuyendo a la transformación de la universidad como afluentes al proceso de liberación nacional y social que nuestro pueblo necesita. Por eso nuestra tendencia jamás se pensó como la pata estudiantil de ningún partido o movimiento, es decir tiene autonomía política en sus decisiones y cada militante debe ser un elaborador y ejecutor conciente de su política. Pero no negamos la participación partidaria y de hecho no creemos que nuestra militancia se termina cuando nos recibimos o nos vamos de la universidad, sino que es una necesidad de transformación que nos acompaña de por vida, y a cada lugar donde vayamos. Como el Che, vemos en la juventud al sector social que menos ha sido corrompido por este sistema, y que con un mayor fervor abraza la lucha por la revolución.
Partimos del análisis de que vivimos en un sistema que es injusto por definición y que no es posible cambiarlo en esencia mediante reformas provisorias, es necesario destruir las relaciones sociales existentes y erigir sobre sus cenizas una sociedad sin clases. Vemos en este estado un macabro aparato represivo, personificado en los tres poderes para mantener este régimen de dominación. En esta “democracia” no vemos más que una dictadura burguesa enmascarada, que no dudaría ni un minuto en regar de sangre a todo el pueblo para mantenerse.
Creemos que para comprender la realidad de las universidades es necesario partir del estudio de la realidad concreta que el país y el mundo atraviesan, bajo la perspectiva firme de cambiarla, ya que somos ante todo una parte del pueblo que lucha. No somos el grupo de iluminados que prepara las recetas a llevar adelante por todos, somos parte y debemos brindar nuestras mejores herramientas al servicio del pueblo.
En este sentido no podemos dejar ninguno de los planos regalados al enemigo, sino que tenemos que dar la lucha en cada uno de ellos intensamente. Debemos complementar las reivindicaciones inmediatas de carácter sindical-estudiantil con aquellas de contenido mayormente político, tanto dentro como fuera de los muros de la universidad, en una perspectiva amplia, y alejada de dogmatismos.
Debemos impulsar la lucha por la democracia en las universidades, ya que de esta manera podremos avanzar por una educación de excelencia a la cual toda la sociedad pueda acceder si lo desea, y que genere conocimientos científicos para el pueblo trabajador.
Entendiendo que nuestra construcción cotidiana debe darse junto a todos los estudiantes organizados o no, que compartan la visión de una universidad pública científica y popular, planteamos que debe ser prioritario que desde la TER se de un impulso a la construcción de una herramienta nacional más amplia, que sobre la base de acuerdos programáticos, se proponga poner a los estudiantes de todo el país en pie de lucha, contra el desfinanciamiento de la educación superior y por la real democracia universitaria.
Partimos del análisis de que vivimos en un sistema que es injusto por definición y que no es posible cambiarlo en esencia mediante reformas provisorias, es necesario destruir las relaciones sociales existentes y erigir sobre sus cenizas una sociedad sin clases. Vemos en este estado un macabro aparato represivo, personificado en los tres poderes para mantener este régimen de dominación. En esta “democracia” no vemos más que una dictadura burguesa enmascarada, que no dudaría ni un minuto en regar de sangre a todo el pueblo para mantenerse.
Creemos que para comprender la realidad de las universidades es necesario partir del estudio de la realidad concreta que el país y el mundo atraviesan, bajo la perspectiva firme de cambiarla, ya que somos ante todo una parte del pueblo que lucha. No somos el grupo de iluminados que prepara las recetas a llevar adelante por todos, somos parte y debemos brindar nuestras mejores herramientas al servicio del pueblo.
En este sentido no podemos dejar ninguno de los planos regalados al enemigo, sino que tenemos que dar la lucha en cada uno de ellos intensamente. Debemos complementar las reivindicaciones inmediatas de carácter sindical-estudiantil con aquellas de contenido mayormente político, tanto dentro como fuera de los muros de la universidad, en una perspectiva amplia, y alejada de dogmatismos.
Debemos impulsar la lucha por la democracia en las universidades, ya que de esta manera podremos avanzar por una educación de excelencia a la cual toda la sociedad pueda acceder si lo desea, y que genere conocimientos científicos para el pueblo trabajador.
Entendiendo que nuestra construcción cotidiana debe darse junto a todos los estudiantes organizados o no, que compartan la visión de una universidad pública científica y popular, planteamos que debe ser prioritario que desde la TER se de un impulso a la construcción de una herramienta nacional más amplia, que sobre la base de acuerdos programáticos, se proponga poner a los estudiantes de todo el país en pie de lucha, contra el desfinanciamiento de la educación superior y por la real democracia universitaria.
domingo, 22 de febrero de 2009
Defendamos el Estacionamiento
El rector de la UBA , Hallú, está decidido a desalojarnos a los estudiantes del estacionamiento de Marcelo T; nada más y nada menos que para poder realizar tranquilo sus negociados y continuar con la tercerización del estacionamiento.
La política de este personaje siempre estuvo atravesada, desde su asunción, por la represión y el hostigamiento al movimiento estudiantil en lucha. No olvidemos que asumió en 2006, trasladando la sesión de la Asamblea Universitaria al Congreso Nacional, aislado con vallas y reprimiendo a los estudiantes con el uso de las Fuerzas Represivas. Asimismo culminó el 2008 llevando al procesamiento de diez estudiantes por defender el CBC de Merlo, lo cual terminó en una derrota absoluta para él porque los compañeros no sólo terminaron absueltos, sino que además se caracterizó que no había existido ningún delito.
Ahora intenta arremeter contra los estudiantes y la educación pública, pretendiendo sacarnos a los estudiantes un espacio que recuperamos para la facultad. Ante una situación deplorable, en la que cursamos en condiciones miserables y de inseguridad, con el reclamo del Edificio Único hace años y las gestiones de turno haciendo oídos sordos ante esto; la lucha por el estacionamiento se torna trascendental: representa un paso fundamental hacia las conquistas que perseguimos los estudiantes en cuanto al reclamo por condiciones dignas de cursado, mayor presupuesto, etc.
Por otra parte no podemos permitir bajo ningún punto que pretendan meter la policía en la Universidad , ya tenemos una victoria a nuestro favor cuando con la organización y coordinación entre las distintas fuerzas y los estudiantes presentes, frenamos el intento de desalojo el lunes por la madrugada. Debemos seguir acumulando fuerzas para que todos los intentos de avanzar sobre nuestras conquistas, sean frenados por los estudiantes. Por ello ahora debemos salir a demostrar – más fuertemente aún - que estamos organizados y no vamos a ceder nada. Vamos a defender lo nuestro y vamos a seguir profundizando la lucha para comenzar un cuatrimestre de auge, continuando la lucha del año pasado – que ya tuvo sus logros -, ahora vamos porque esas victorias parciales se concreten.
Para finalizar denunciamos la actitud de Shuster que se llama al silencio, cuando es latente la represión dentro del predio de la Facultad de la que es decano; sin embargo, y pese a que se le reclamó que se pronuncie, se ha sucumbido en un silencio absoluto.
La política de este personaje siempre estuvo atravesada, desde su asunción, por la represión y el hostigamiento al movimiento estudiantil en lucha. No olvidemos que asumió en 2006, trasladando la sesión de la Asamblea Universitaria al Congreso Nacional, aislado con vallas y reprimiendo a los estudiantes con el uso de las Fuerzas Represivas. Asimismo culminó el 2008 llevando al procesamiento de diez estudiantes por defender el CBC de Merlo, lo cual terminó en una derrota absoluta para él porque los compañeros no sólo terminaron absueltos, sino que además se caracterizó que no había existido ningún delito.
Ahora intenta arremeter contra los estudiantes y la educación pública, pretendiendo sacarnos a los estudiantes un espacio que recuperamos para la facultad. Ante una situación deplorable, en la que cursamos en condiciones miserables y de inseguridad, con el reclamo del Edificio Único hace años y las gestiones de turno haciendo oídos sordos ante esto; la lucha por el estacionamiento se torna trascendental: representa un paso fundamental hacia las conquistas que perseguimos los estudiantes en cuanto al reclamo por condiciones dignas de cursado, mayor presupuesto, etc.
Por otra parte no podemos permitir bajo ningún punto que pretendan meter la policía en la Universidad , ya tenemos una victoria a nuestro favor cuando con la organización y coordinación entre las distintas fuerzas y los estudiantes presentes, frenamos el intento de desalojo el lunes por la madrugada. Debemos seguir acumulando fuerzas para que todos los intentos de avanzar sobre nuestras conquistas, sean frenados por los estudiantes. Por ello ahora debemos salir a demostrar – más fuertemente aún - que estamos organizados y no vamos a ceder nada. Vamos a defender lo nuestro y vamos a seguir profundizando la lucha para comenzar un cuatrimestre de auge, continuando la lucha del año pasado – que ya tuvo sus logros -, ahora vamos porque esas victorias parciales se concreten.
Para finalizar denunciamos la actitud de Shuster que se llama al silencio, cuando es latente la represión dentro del predio de la Facultad de la que es decano; sin embargo, y pese a que se le reclamó que se pronuncie, se ha sucumbido en un silencio absoluto.
MIÉRCOLES 18/2 – 18 hs. FESTIVAL EN ESTACIONAMIENTO DE MARCELO T.
VIGILIA Y BLOQUEO DEL ESTACIONAMIENTO
Unamos todas nuestras fuerzas.
Por mayor presupuesto!
Edificio único ya!
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